Evita los agobios del tráfico y del transporte público moviéndote tranquilamente en un vehículo privado por las mejores atracciones de Roma. La visita empezará desde tu hotel del centro, donde te recogerán y te llevarán de vuelta.
Durante el día, podrás descubrir el Coliseo, el Foro Romano y el monte Palatino con una visita guiada, así como los Museos Vaticanos, la Capilla Sixtina y la basílica de San Pedro. También tendrás la oportunidad de descubrir todas las plazas y fuentes principales del centro de la Ciudad Eterna, como la Fontana di Trevi, la Plaza de España, el Panteón, la Plaza Navona y mucho más. A mitad de camino, podrás disfrutar de una comida local exquisita en un típico restaurante romano cerca del Coliseo o del Vaticano. Al final del día, regresarás a tu hotel o al sitio que prefieras del centro de la ciudad.
Los domingos y festivos religiosos, el Vaticano está cerrado. Así que, si haces la visita un domingo, verás los Museos Capitolinos en su lugar. Los museos tienen vistas a la colina Capitolina, otro museo por sí mismo. Desde arriba, las vistas del Foro Romano son espectaculares. Los Museos Capitolinos albergan unas esculturas magníficas que rememoran el glorioso pasado de la ciudad, como las estatuas de La Loba y de Marco Aurelio. Aquí, también podrás visitar en la galería algunas obras maestras de Caravaggio y de otros grandes artistas.