Experiencias excepcionales
- Diseñadas por nosotros, un grupo líder y de confianza en el sector de viajes
- Con guías expertos y amables
- Muy bien valoradas por los clientes
Esta experiencia cumple con los criterios del Consejo Mundial de Turismo Sostenible. Al elegir esta experiencia, proteges los lugares que te gustan, cuidas el medioambiente y colaboras con las comunidades locales
Hemos diseñado nuestras experiencias con esmero para ayudarte a sacarle el máximo partido a cada viaje.
En este tour de un día completo, visitarás el casco antiguo de Córdoba, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, en mayo, cuando cobra vida durante el concurso anual de patios. Verás los patios adornados con flores en una visita guiada, descubrirás la gran mezquita y disfrutarás de tiempo libre para explorar. Paco, uno de nuestros guías locales, dice: "Rasca bajo la superficie de Córdoba y encontrarás Oriente". Dondequiera que mires, el pasado te devuelve la mirada. Y para disfrutar del verdadero sabor de la Córdoba moderna, asegúrese de probar nuestra característica sopa de salmorejo fría.
Córdoba, que alguna vez fue la ciudad más grande de Europa, ofrece una mezcla exótica de influencias romanas, moriscas, cristianas y judías, todas reflejadas en el casco antiguo. Emprenderás un extenso recorrido a pie por el barrio de San Basilio para verlo todo con tus propios ojos, mientras contemplas un par de patios decorados con flores para el festival que se lleva a cabo durante todo el mes de mayo. Aportan mucho color a la ciudad y son eminentemente instagrameables.
Luego, se le entregará su boleto para ingresar a la mezquita medieval, o Mezquita, la obra maestra de Córdoba. Obtenga toda la información de su guía local experto sobre la historia detrás de este sitio declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Cuenta con 800 arcos de dos niveles, cúpulas en forma de panal y muchos más tesoros. Excepcionalmente, alberga en su centro una catedral renacentista decorada sin reparar en gastos. También hay tiempo libre para almorzar (¿por qué no ir a La Judería a tomar un salmorejo?) y la posibilidad de cruzar a pie el famoso Puente Romano.